lunes, 2 de septiembre de 2019

A Cara o Cruz

Si piensas dos veces algo pierde color

Es curiosa la manera en que funciona la vida, la mayor parte del tiempo nos dedicamos a planear cómo nos gustaría que fuera y al final lo que termina marcándola en verdad son las cosas que no pensamos del todo, "La vida es aquello que te va sucediendo mientras estás ocupado haciendo otros planes.", si John Lennon puesto de anfetas lo decía debe de ser por algo, ¿no?

Hace un par de meses no pensaba en escribir alguna carta pronto, todos mis escritos estaban bajo llave y la parte creativa de mi mente estaba en pausa, en realidad jamás fue mi intención detenerla, pero simplemente se quedó sin inspiración, se acabó la tinta con la que escribía versos y no había musa que me incitara a rellenarlo, pero... La vida da vueltas, supongo.

Sin embargo, aquí estoy, una semana después de haber escrito la última, teniéndola guardada en mi cajón, buscando valor para entregarla pronto, sudando frío por miedo a que esa musa que me ha hecho rellenar el tintero se convierta de nuevo en una extraña, dudando sobre qué hacer a las dos de la mañana de un lunes.

El amor en el cine

 

Quien conozca un poco sobre mis gustos en películas sabrá que soy mucho de ver películas románticas, pero pocas son las que termino guardando en mi memoria, soy una persona que disfruta ver historias reales, que expresen lo que podría llegar a sentir, es así, que pienso que el amor ideal no existe, y los finales felices rara vez se suelen dar.

Es así, que en mi biblioteca de películas la mayor parte tiene un final triste, porque eso es lo que se siente al terminar el amor, tristeza, sin embargo, en los últimos dos meses me encontré con dos joyas que me pusieron a ver el techo por más de una noche, "The Bridges of Madison County" y "Eternal Sunshine of a Spotless Mind". 

Antes de continuar, daré spoilers de las películas, realmente no es como que importe mucho e incluso creo que puede enriquecer la experiencia en caso de que alguno de ustedes decida echarles un vistazo, son dos películas que se salen del estereotipo, además de que en ambas hay actuaciones fenomenales de parte de los protagonistas (Clint Eastwood, Jim Carrey, Meryl Streep y Kate Winslet).

"The Bridges of Madison County", un amor espontáneo.

 

El amor a veces es sencillo, a veces sólo se requiere de valor y coraje para poder vivirlo, olvidarse del qué dirán y preocuparse solamente por la persona que te acompaña, es esta sencillez la que puede hacer que duela tanto, porque en ocasiones uno es incapaz de dictarle al corazón lo que quiere, pero a veces uno tiene que aprender a resignarse, a veces el amor es cruel.

Francesca quería explorar el mundo pero terminó casándose con Richard, pasaron juntos su vida y formaron una familia de dos hijos, fueron estos los que hicieron a Francesca poner un alto a su vida, sin embargo, estos han crecido y ella ha pasado a ser un actor secundario en su vida, es así, que en un fin de semana que se queda sola, conoce a Robert, un fotógrafo de National Geographic.

Robert se ha dedicado a viajar por el mundo en busca de las mejores fotos, naturaleza, guerra, eventos históricos, allá donde exista posibilidad de encontrar una buena foto Robert está presente, al conocer a Francesca ambos experimentan una conexión indescriptible, que hace que ambos quieran abandonar juntos e irse a compartir el resto de sus días, sin embargo, la vida no es tan sencilla.

El clímax llega cuando ambos se dan cuenta de que, si se queda Francesa con su familia, no serán capaces de vivir ese amor que sienten, ese que te genera una certeza que sólo se siente una vez en la vida, sin importar cuántas vidas se puedan llegar a tener, y aunque ambos saben que así es, deben de aprender a amarse sin verse, porque esa es la única manera en que se pueden amar.

Una vez que él se marcha del pueblo ella no vuelve a verlo, la película gira en torno a los hijos de Francesca descubriendo esta historia, pues ella había pedido expresamente que sus cenizas fueran arrojadas de un puente a pesar de ya tener un lugar de entierro a lado de su marido, ¿la razón?, "Le di mi vida a mi familia, me gustaría darle a Robert lo que queda de mí".

Esta película me enseñó que no necesitas poseer para amar, que se puede amar sin necesidad de compartir la vida con esa persona que amas, y haciendo un análisis me di cuenta de que esa es mi manera de querer, más que querer estar junto a alguien, deseo su felicidad antes que lo demás, y aunque es difícil aceptar que a veces esta no me involucra, siempre respeto esa decisión.

 "Eternal Sunshine of a Spotless Mind", la importancia de las memorias.

 

Todo lo que soy se debe a lo que he vivido, si me hice resilente a ciertas cosas fue porque estas me aquejaron por mucho tiempo, si me hice débil ante otras fue porque aprendí que a veces hay que bajar la guardia y confiar en que la otra persona no te va a destrozar, todo el conjunto de actitudes, pensamientos y sentimientos que experimento tiene un origen, mi memoria.

Jamás olvidaré mi primer gran concierto, Café Tacvba en el Hipódromo, la lluvia cayendo mientras sonaba "Eres", tirarme al suelo y contemplar el cielo mientras sonaba "El Espacio", tampoco olvido mi primer beso, Mariel en la Primaria (feliz cumpleaños por cierto), ni qué decir de cuando llegó Layla a mi vida o la primera vez que fui a Naucalpan a ver a Frida y no sabía volver a casa.

La primera borrachera con mis amigos de la universidad, el concierto de Nickelback que le siguió con Luis, los $80 que le di de propina al Uber porque en el camino me vio triste, me dijo que todo iba a estar bien y puso "Need you now", la vez que me puse tan ebrio que perdí el conocimiento en una fiesta con chicas de ESIQIE y Matus (LOL).

Todo sucede por algo, aunque en el momento no entendamos el porqué, eventualmente cobra sentido, o al menos eso es lo que me gusta decirme a mí mismo para evitar volverme loco, es más sencillo afrontar la vida cuando se le asigna un rumbo, sin embargo, ¿qué pasaría si pudieras borrar a una persona de tu vida?

Joel y Clementine son dos polos opuestos, él es un introvertido que suele evitar el contacto con extraños, ella una extrovertida que gusta de iniciar conversaciones con desconocidos, él se está planteando volver con su ex novia Naomi, ella no busca nada en realidad, sin embargo, los polos opuestos se atraen, y esta no fue la excepción.

Sin embargo, las inseguridades de Joel y la impulsividad de Clementine terminan por hacer que ambos discutan, y un día Clementine toma una decisón drástica, borrar a Joel de su memoria (en el universo donde se desarrolla la película es posible hacerlo), y él, al ver que ella fue capaz de hacer eso, decide seguir el mismo camino.

Antes de borrar la mente se debe de realizar un mapeo del cerebro, razón por la cual se hace una entrevista a la persona que esta describa todo lo que desprecia de la persona que quiere olvidar. El proceso es sencillo, te tomas una pastilla para dormir y los trabajadores de Lacuna van a tu casa y se encargan de borrar todo recuerdo que tengas con esa persona que quieres olvidar.

Es así, que se comienza a hacer una introspección sobre todo lo que pasó en su relación, a la par se descubre que el doctor encargado del proyecto borró la mente de la novia de uno de los ayudantes, al enterarse ella se va y envía las grabaciones de las entrevistas a todas las personas que se sometieron al tratamiento, Joel olvida a Clementine, pero no del todo.

Joel siente la necesidad de ir a Montauk, de camino se encuentra a Clementine, comienzan de nuevo y la lleva a casa pensando que no se conocen de nada, sin embargo, en la casa de Clementine está la grabación y, al escucharla, Joel piensa que es una broma y se va a casa para encontrarse con la grabación de su entrevista, es así, que Clementine llega a verlo.

En este punto ambos saben que ya vivieron una relación y fracasó, que Clementine terminó recurriendo al tratamiento y Joel siguió el mismo camino, podrían volver a comenzar y terminar igual, pero, ¿y si hicieran las cosas de manera diferente esta vez?, la película termina con ambos decidiendo comenzar de nuevo a pesar de todo, pero...¿Es lo correcto?

No sé, siempre seré de la idea de que el amor es una apuesta que no siempre se puede ganar, de mi parte sólo puedo decir que mi manera de querer es ciegamente, confiando en mi pareja e impulsando a esta a ser la mejor versión de sí, puede que no sea la manera más inteligente de hacerlo, pero el amor se debe de analizar como un todo, porque si se analiza por partes deja de tener sentido.

¿Escribir para las masas?, no, para mis musas.

 

He pasado una semana de mierda, desde que comenzó me he dedicado a recibir malas noticias, Effy se fue, perdí el sueño y el apetito, terminé de confirmar algo que sabía pero me gustaba pensar que no era real... La vida es una patada en la uretra que, sólo de vez en cuando, te da un respiro y deja que te vuelvas a descuidar para volver a golpearte en cuanto voltees, excelente, ¿no?

Siempre he sido de la idea de que todo lo que escribo para una musa le pertenece a ella en cuanto lo termino, y es quizá por esto que no he terminado esto en lo que trabajo hoy en día, para no tener que entregarlo, pero, ¿a quién engaño?, muy probablemente da igual si entrego la carta o no, y de que se pudra en mi cajón a que termine en la basura... Prefiero que sea leída.

Es así, que vengo a preguntarles qué hacer, estoy indeciso respecto a entregar la carta o no, no la he visto (o quizá no la he buscado), así que sigo llevándola en la camisa, si no la entrego eventualmente terminará en el Blog, si la entrego... Será sólo para ella. Así que, contesten la encuesta y ayúdenme a decidir. Los amo.

-Con cariño, EMZA.


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