Fin de mes

Paralelismos de mierda

Los déjà vu no son muy comunes, sin embargo a veces entro en rachas en las cuales siento que estoy en un déjà vu especial, uno en el cual cambian los personajes pero sigue siendo la misma obra, me siento como un actor en una obra en la cual cambia el elenco pero sigue interpretando al mismo personaje, y es algo bastante jodido en realidad.

Quien me conoce, sabe que uno de los demonios con los que más problemas emocionales he llegado a tener y, hasta la fecha sigue en un combate continuo con mis sentimientos, es el tema de la fidelidad dentro de una relación, pues mi padre ha engañado a mi madre e incluso tiene un hijo fuera del matrimonio, es por esto que desde siempre una prioridad mía es ser fiel a las personas que aprecio.

No malinterpreten las palabras, no me opongo a relaciones poliamorosas y demás variaciones que pueda existir de lo tradicional, las apoyo y las respaldo, sin embargo, pasa lo mismo que con la comunidad homosexual, los respeto y busco su igualdad, pero no tengo interés alguna en formar parte de la práctica de alguna relación de ese tipo.

Es por esto que, uno de los valores a los que más atención le pongo es el de la honestidad, porque sé bien que es imposible sólo fijarse en una persona y es por esto que sólo con el diálogo sincero puede llegarse a mantener una relación de pareja sana. El momento en que mi relación con Frida perdió el rumbo fue cuando las mentiras comenzaron a formar parte de la relación.

Sé de antemano que quizá sea imposible encontrar una relación en la cual no existan las mentiras, ya que las existen de todo tipo y, en ocasiones nos parecen necesarias con el afán de no lastimar a la persona que queremos, sin embargo, siempre he sido de la idea de que, si me equivoco, debo de asumir mis errores, ser honesto con la persona a la que le he fallado y pedir perdón, no esconderme.

El miedo

Es así que, analizando casos ajenos al de Frida y al de mi padre, me di cuenta de que hay una constante en todas estas situaciones, y es que prácticamente nadie es capaz de aceptar una infidelidad y prefieren intentar esconderla, pero la mierda siempre flota, y tarde o temprano uno termina descubriendo todo, y es aquí donde viene lo más jodido.

A Frida le pregunté con dos dedos de frente si había alguien más, se lo pregunté no por la necesidad de saberlo, pues estaba ya bastante seguro de que lo había, sin embargo, lo hice porque quería ver si ella era honesta y podía decirlo cara a cara. Tristemente debo decir que no fue así, y cuando terminamos la razón que recibí fue "Ya no veo futuro a esto".

A la afirmación de arriba la comprendí, dolía, pues implicaba que tenía que dejar al que, hasta el momento, había sido el centro de mi vida, pero lo intenté asimilar. Y entonces pasó algo fatídico, de la nada me mandó un mensaje diciéndome que ya era feliz con alguien más, y fue entonces que mi mente se fue a la mierda, fue entonces que tuve que hacer algo que no quise hacer antes.

En el tiempo en el que estuve con Frida tuve la costumbre de confiar en ella, de creer que lo que decía ella y, antes de siquiera sacar conclusiones de lo que dijera la gente, consultarla para así tener un veredicto. Ese mensaje fatídico lo único que hizo fue obligarme a dudar de su palabra, y eso era algo que no había querido hacer, pues hacerlo implicaba cuestionar mis memorias.

Dos personas, la misma mierda

En estos días me he percatado de algo, Frida y mi padre no son muy distintos entre sí, me atrevería a decir que son distintas versiones del mismo tipo de persona. Es triste darme cuenta de que lo que más tienen en común es que en algún punto quise ser como ellos y, al darme cuenta de las personas que en realidad eran, terminé bastante decepcionado de que mis ídolos eran de barro.

Platicando con mi madre me di cuenta de que, tanto mi padre como Frida terminaron queriendo jugar un papel de víctima, en el cual al momento de despedirse siempre terminan "deseando lo mejor" de una manera hipócrita y asumen que uno guarda rencor por todo lo que esa persona te hizo pasar, supongo que no terminan de entender que uno no desee el mal a pesar de todo.

Suena triste todo, pero tengo que agradecerle a Frida todo lo que me hizo pasar, gracias a toda la mierda que hizo ahora puedo lidiar con esto de una manera más tranquila. Aprendí de mis errores con ella, y ahora que me toca tirar en medio de todo este desastre, me puedo mantener estable en medio de un caos que existe, y puedo decir que no espero a que alguien venga a arreglar todo.

Reflejo

Recuerdo que prometiste estar aquí si él se marchaba,

otra mentira barata que decidiste no mantener en pie,

fueron palabras vacías de tiempos en que me "amabas",

fueron espejismos e ilusiones que con el tiempo olvidé.

Me da risa ver que tú y mi padre son muy similares,

dos personas brillantes que son casi eminencias,

pero incapaces de ser fieles y con amantes particulares,

ambos carecen de valor para aceptar las consecuencias.

Y quizá es por eso que duele tan poco que se vaya,

debo de agradecer tus mentiras y tu promesa rota, 

sin querer me preparaste para afrontar esta batalla, 

mi padre y tú son dos versiones del mismo idiota. 

Hablé con mi madre y le conté todo lo que ha pasado,

estaba sorprendida pues también te creía diferente, 

y al comparar historias un paralelismo hemos notado, 

ambos son mentirosos y ninguno dice las cosas de frente. 

Es curioso sentir hoy en momentos de desesperación, 

pues he vuelto a vendar las heridas que me han creado, 

no es que haya aprendido a hacer de hielo mi corazón, 

más bien es que a que me fallen ya me he acostumbrado.

-EMZA.

Espero que les haya gustado la entrada de hoy amigos, sé que quizá es algo diferente a lo de siempre, pero me sentía con la necesidad de contar toda la mierda que está pasando. 

La recomendación de hoy será un regreso al rap, ya mañana será un día para poner otro género.

P.d: Mañana regreso a la escuela, así que quizá comience con las inconsistencias en la publicación de entradas, sin embargo, no voy a abandonar el Blog. Los amo. <3

-EMZA.